"En tiempos de Internet, aún amo el ritual de oler cada página del diario de papel como si fuera el pan más rico a la
hora exacta del desayuno. Soy de las que cree que para hacer hoy un buen periodismo digital -clave en nuestro
trabajo cotidiano-, es necesario conservar el olfato periodístico. Y un fino instinto para buscar y encontrar
información original, atractiva, que interese a los lectores de todos los soportes periodísticos. Trabajo en Clarín
desde 1990, fui cronista, redactora y editora. Desde 2013 son la Editora Jefa de Sociedad, una de las secciones
más intensas e interesantes para desarrollar el oficio. En mis 27 años de carrera cubrí inundaciones e incendios,
congresos de salud y de educación (en el país y en el exterior), escribí notas duras y otras blandas, edité notas
que merecieron el Premio Rey de España y entrevisté a políticos, científicos y estudiantes, siempre en la
búsqueda de esa combinación mágica de aromas y placeres que envuelve a los que respiramos y transpiramos el
periodismo. Esa es la pasión que trato de trasmitir desde 2007 en el aula-redacción de la Maestría de Periodismo
de Clarín-San Andrés. Para hacer periodismo, primero hay que olerlo".