Por iniciativa de su hijo, la obra completa de José Luis Romero está disponible en internet
Hace una década, Luis Alberto Romero se impuso un objetivo: reunir en un solo lugar todas las obras completas de su padre, el reconocido historiador José Luis Romero (1909-1977). “Los hábitos de lectura han cambiado mucho. Ya no se usa imprimir obras completas ni tampoco es muy útil hacerlo. Por eso, la mejor alternativa era hacer una edición de obras completas digitales”, explica.
La recopilación de toda esa obra escrita, junto con material inédito, clases, testimonios de su vida pública y distintos ensayos sobre su tarea como historiador están disponibles en la página web jlromero.com.ar. El sitio utiliza un sistema vinculado a las “humanidades digitales”, cuya principal ventaja es poder buscar por palabras o conceptos dentro de los textos. “No teníamos idea del trabajo que implicaba ni del éxito que iba a tener”, afirma Romero sobre el proyecto de Obras Completas, que aún tiene pendientes algunos pasos para estar totalmente concluido.
Ya están disponibles casi todas las obras y solo faltan algunos libros que, al estar todavía en circulación, no pueden hacerse públicos, entre ellos la versión en español del emblemático Latinoamérica, las ciudades y las ideas.
La iniciativa para reunir en un único sitio web toda la obra de José Luis Romero recibió el apoyo de la Universidad de San Andrés, y tomó como modelo una página estadounidense similar que recopila los trabajos del poeta Walt Whitman. Por eso, buscaron incluir más material que complementara las obras propiamente dichas, incluyendo desde un archivo fotográfico, textos inéditos, clases grabadas, correspondencia personal y también trabajos especiales y originales encargados a distintos autores sobre la obra de José Luis Romero.
El Text Encoding Initiative o TEI, propio de las humanidades digitales, fue una iniciativa implementada por el colega y socio de Romero en este proyecto, Nicolás Quiroga, un historiador marplatense que “sabe muchísimo de internet”, afirma Romero. Este sistema “tiene que ver con generar en el texto las marcas necesarias para que los buscadores que existen en el universo de internet puedan buscar por palabras. Al que le interese el tema burguesía, por ejemplo, en algún momento se va a cruzar con que un autor en la Argentina escribió sobre la burguesía”, explica Romero. “Eso tiene tantas posibilidades de desarrollo que son inimaginables”.
Sin embargo, a pesar de que ambos realizaron enormes avances que los acercan a la meta final de recopilar toda la obra completa de José Luis Romero, aún quedan tareas pendientes. “No lo voy a dar por terminado mientras viva [al sitio de Obras Completas], porque desgraciadamente siempre se me ocurren nuevas cosas”, afirma Romero. Hoy, su prioridad para continuar con la concreción del proyecto es reunir la correspondencia del autor de La cultura occidental. “Es una tarea grande porque mi padre no guardó copias de sus cartas. Entonces, hay que buscarlas en archivos de sus posibles corresponsales, que las pueden tener guardadas como cartas recibidas. Pero vale la pena hacerlo”, agrega Romero.
En un contexto en el que crece la digitalización, profundizada aún más por la pandemia, que con sus restricciones llevó al cierre temporal e indefinido de prácticamente todos los archivos históricos, es cada vez más relevante contar con un acceso fácil a obras y fuentes digitales.
“El mundo digital es el mundo del futuro y en buena parte del presente. La capacidad para buscar cosas en internet siempre me deja admirado. Para los archivos es un tema de discusión hasta qué punto apostar a la digitalización de la información. Y en rigor nadie sabe, no hay experiencia, todavía no pasó tiempo suficiente como para saber si las cosas se borran o no. Todo el universo digital por ahí se derrumba, y el futuro conservará solamente los pedazos de libros impresos que han quedado”, señala el historiador, preocupado por la perdurabilidad de los archivos digitales.
Los inicios del proyecto de Obras Completas se dieron después de la experiencia de unas jornadas realizadas en memoria de José Luis Romero, en 2009. Allí, quedó claro que había un enorme interés en la figura del reconocido historiador. “Estas jornadas las organizó la Universidad Nacional de San Martín en la Biblioteca Nacional. Eran bastante especializadas, porque se presentaban trabajos sobre él. Había mucha gente muy atenta e interesada en el tema. No creo que pase mucho con otros intelectuales o historiadores de edades similares”, reflexiona Romero. El entusiasmo que genera el trabajo de su padre como historiador se ve reflejado también en la cuenta de Twitter del proyecto, que tiene más de 3000 seguidores.
“Es maravilloso poder leer con ojos nuevos algo que quizá está en el autor sin que este sea consciente de que ese elemento está presente en su obra. Muchos descubrieron que José Luis Romero era un objeto de estudio, así como pueden serlo otros autores. Me pone contento haber ganado a gente tan valiosa y con un fuerte interés por la obra de José Luis Romero. Es una satisfacción”, dice Luis Alberto.